
Si en el primer recital leíamos y bailábamos con el amor y los aromas, en este segundo recital la poesía y la música se envolvió en desamor y decenas de sabores. Preciosa y entrañable experiencia con las personas que nos acompañaron.
Si en el primer recital leíamos y bailábamos con el amor y los aromas, en este segundo recital la poesía y la música se envolvió en desamor y decenas de sabores. Preciosa y entrañable experiencia con las personas que nos acompañaron.